NÉSTOR PAVÓN REVISITADO

exposición temporal

Trabajó perfectamente todos los recursos de esta tendencia artística desde el juego con la mancha informe hasta las construcciones geométricas y ópticas en las que lo presente tiene, a veces, el mismo protagonismo que lo ausente. Aunque sus producciones han de entenderse en el contexto del devenir de las artes hispanas del momento, nadie puede negar que nuestro artista nunca se caracterizó por el seguidismo, sino que siempre se definió por su clara vocación personal y por la búsqueda de planteamientos propios, en muchas ocasiones, claramente reconocibles.

Néstor Pavón fue un artista pleno y poliédrico, como aquellos grandes personajes del Renacimiento, capaces de dominar todas las artes y todas las técnicas, sustentando su trabajo no sólo en una portentosa capacidad innata sino también en un enciclopédico conocimiento teórico que siempre se preocupó en acrecentar. Su pintura va desde la acuarela, al óleo y al fresco sin olvidar uno de sus campos más notables de experimentación: el collage. No podemos olvidar una de las facetas más queridas por el autor, el de la ilustración de libros llegando a convertirse en uno de los referentes en este campo en el ámbito burgalés del último tercio del siglo XX y de los albores del XXI. Su escultura alcanza todos los registros como las piezas ligadas al ornato público, o las obras de interior, manejando con igual soltura la talla de la piedra y la madera o la fundición y el trabajo de los metales. Todos estos aspectos aparecen en la presente exposición que, sin pretender convertirse en antológica, es un buen exponente de las grandes aportaciones de este gran creador burgalés.